Debo confesar que me encantan las ucronías así que cuando
escuche de “The Man in the High Castle”, una de las producciones más ambiciosas
de Amazon Studios para este año, me llamó la atención de inmediato. Se trata
de la adaptación de la novela del mismo nombre de Philip K. Dick que muestra la
historia de una realidad alterna en donde los nazis y sus aliados ganaron la Segunda
Guerra Mundial, lo que conllevó a la división de Estados Unidos en tres
estados; el lado japonés, Pacific States of America, The Greater Nazi Reich y
la “zona neutral”.
Aquí el mapa para una mejor conpremsión.
La resistencia en tierra de nazis
“The Man in the high Castle” es una de aquellas series que llama
la atención por su espectacular argumento, pero si esta no es bien ejecutada,
toda el potencial se va por la borda. Felizmente, este no es el caso, porque incluso el propio intro es asombroso e
impactante, lo que hace que te enganches de inmediato. El elenco es otro punto
a su favor, porque básicamente, nos sirven para
introducirnos en dos dictaduras, cuya única diferencia es la cultura. Los japoneses
y los alemanes están obligados a comportarse de manera diplomática, pero se
puede ver que en cualquier momento la alianza puede terminar de desquebrajarse, ya que cada uno
actúa en pos de sus propios intereses. Dentro de la historia tenemos a Juliana
Crain (Alexa Davalos) que es una suerte de luz de esperanza, pero no porque sea “especial” o “la
elegida", si no porque después de ver la película prohibida “The Man in the High
Castle”, que muestra cómo hubiera sido el mundo si es que Estados Unidos
hubiera ayudado a los aliados a ganar la Segunda Guerra Mundial, comienza a
buscar un propósito, lo que la lleva a emprender un viaje peligroso, debo mencionar
que la película se la dio su hermanastra quien luego fue asesinada a manos de la
policía japonesa.
Siempre hay una chica, ¿verdad?
Después también tenemos a Joe Blake (Luke Kleintank más recordado como Finn en "Bones"), un carismático joven
que se cruza en el camino de Juliana, podría profundizar más en el tema, pero
creo que entraría en el terreno del spoiler y esta serie es demasiado buena
para arruinarla. Lo que sí diré es que el patriotismo está presente de una
manera sutil y tímida. Toda la serie nos muestra una sociedad distópica donde
no hay héroes, solo personas, algunas conformes con vivir sin derechos ni libertades y que lo único que quieren es no tener
problemas, pero también hay rebeldes pertenecientes a la “Resistencia Americana”
que buscan un modo de regresar a la libertad de antes de la guerra y trabajan
de manera anónima porque tanto los nazis como los japonés, los ven como
traidores a la patria. En un territorio donde las reglas las ponen los dictadores,
no hay ningún tipo de procedimiento, ni mucho menos justicia y esta nueva
sociedad parece haberse acostumbrado a agachar la cabeza.
Conoce a Joe Blake
"The Man in the high castle" no es apología nazi
Siempre he dicho que la fotografía de "Gotham" es hermosa y que
vería esa serie así fuera mala, solo por la belleza de su fotografía. "The Man
in the High Castle" tiene una fotografía similar, en cuanto a su tono sombrío
que genera un ambiente de incertidumbre que invita a la introducción de un
nuevo mundo que impresiona por sus escenarios llenos de propaganda nazi. Ese es
el punto de la polémica, obvio que es chocante ver la esvástica en lugares icónicos
americanos, pero se entiende el contexto en que se desarrolla la serie. No es
una publicidad gratuita, hay que hacer énfasis que no se trata de una apología
a los nazis, de hecho, critica su política y desde el principio evidencia el
terrible panorama en el que hubiéramos vivido si es que ellos hubieran ganado
la guerra y sus implicancias; la extinción de judíos, la suspensión de derechos
humanos, la asignación de trabajo sin opción a elección, etc. Se trata de un mundo en donde la libertad es solo un recuerdo y donde la nueva generación de jóvenes no tiene aspiraciones porque no sabe lo que es vivir en un mundo libre.
Realmente eran fanáticos de la esvástica... está en todos lados en la serie.
En conclusión, “The Man in the High Castle” es altamente recomendable porque ha
plasmado de manera realista (de una manera perturbadora) su historia, tan completa como controversial, en un nuevo mundo predominado por los nazis y los japoneses, y aunque el trama avanza lento, está lleno de
giros y secuencias igual de extraordinarias que la premisa principal. Este año
ha habido muy buenas series, especialmente de Netflix, pero “The Man in the High
Castle” se corona como la más original y única en su naturaleza y es que no ha
habido ninguna serie que profundice en realizar ejercicios contrafácticos de historias
alternativas que pudieron suceder. Irónicamente, sí hemos tenido varios
episodios “Qué tal si…” en donde se explora el escenario “Qué hubiera pasado sí”,
pero volviendo a “The Man in the High Castle” esperemos que así como el libro
definió el género en la literatura de versiones alternativas de la historia, la
serie abra las puertas a este tipo de ficción especulativo.