Se podrá decir mucho sobre el “Snyder Cut”. Por supuesto, la opinión que se tenga sobre esta nueva y extensa versión de 4 horas de duración de “Liga de la Justicia” depende mucho de la subjetividad y de lo familiarizado que estamos con la formula impuesta por Marvel en lo que películas de superhéroes se trata, pero también de lo que sabemos de la historia detrás del denominado “Snyder Cut”. Lo que es cierto es que el “Snyder Cut” está ligado a una multitud de casualidades, entre batallas internas de poder, una tragedia familiar y el oportunismo de HBO Max, todo eso hace que este lanzamiento sea un triunfo extraño, único e irrepetible, tanto de Zack Snyder, de sus fieles seguidores y también, por qué no aceptarlo, de HBO Max.
En un extenso artículo de Vanity Fair titulado "La Liga de la Justicia: La impactante, emocionante y desgarradora historia real del #TheSnyderCut" y en el video “la verdadera historia y polémica detrás del “SnyderCut” del Monitor Geek, se detallan los pormenores y el contexto en el cual surgió esta nueva versión de “La Liga de la Justicia”. El conflicto entre visiones de Zack Snyder y el estudio Warner Brothers fue un secreto a voces en la industria. Snyder no es el primer director que tuvo que luchar para prevalezca su visión, pero para su mala suerte, “Batman v Superman: el origen de la justicia” recibió malas críticas y un recibimiento tibio en el cine. En ese sentido, el estudio realmente necesitaba que “La Liga de la Justicia” reivindicara el magullado universo cinematográfico de la DC. En ese momento, en la Warner Brothers existía una lucha de poder ya que por un lado estaban la DC, los directivos del estudio, los productores y por el otro, Zack Snyder. Los enfrentamientos eran constantes y pese a la resiliencia de Snyder, el estudio le perdió la fe, pero Snyder no dejó de pelear hasta que su hija, Autumn, se suicidó. Es entonces que Zack Snyder decide dar un paso al costado y concentrarse en su luto.
No es la primera vez que un director abandona un proyecto, pero generalmente, no es tan público. La WB decidió vender la narrativa que tras su tragedia familiar, Snyder le había dejado la posta a Joss Whedon, el creador de “Buffy” y “Firefly”, que venía de dirigir “Avengers” y “Age of Ultron”. Para el estudio, Whedon “arreglaría” “La Liga de la Justicia” y eso significaría un reboot del universo cinematográfico de la DC. En teoría, Whedon iba a complementar la visión de Snyder, pero en la práctica, Whedon rehizo la película, mando a volver a grabar ciertas escenas y agregó otras historias. Aquí es donde se origina el famoso caso del “mustachegate”, lo que debió ser un mal augurio. Como se sabe, el “mustachegate” se refiere a la barba de Henry Cavill en “Mission Impossible”. El estudio de Paramount prohibió a Cavill afeitarse, lo que complicaba los reshoots de “La Liga de la Justicia”, por lo que la Warner Brothers tuvo que borrar digitalmente esa barba, algo que costó muy caro y que no quedó tan bien que digamos.
El ”mustachegate” sería una de las tantas razones por la cual “La liga de la Justicia” de Joss Whedon fracasó terriblemente. Ante las malas críticas, la WB sacó cuerpo e incluso Whedon también. Lo que sea que habíamos visto era un Frankstein extraño de Whedon y de Snyder. Lo que habíamos visto era culpa de la WB. Ante los ojos de sus fervientes fanáticos, Snyder era el “David” de la Goliat de la WB y la Goliat había cometido un gran error; había destrozado la versión de Snyder. Entonces, se comenzó una campaña a su favor porque estaba claro que Whedon no había continuado la visión de Snyder. “Relase The Snyder Cut” llegó a ser uno de esos movimientos en internet que consigue lo que quiere a través de la presión. El fandom, como el mismo Snyder lo ha aceptado, está compuesto por de todo, hay toxicidad, sí, pero también solidaridad. Se alquiló una pantalla en Nueva York demandando el Snyder Cut, pero la mitad del dinero que se gasto fue para una fundación en prevención del suicidio.
Si pudiéramos definir un momento en que las estrellas comenzaron a alinearse a favor de Snyder diría que fue cuando Ray Fisher (Cyborg) denunció los maltratos que había sufrido por parte de Whedon. Además, también acusó a los directivos de la WB de proteger a su nuevo director, aunque esa protección era más interés que convicción. Joss Whedon no “salvó” a la DC. Whedon hizo lo que sabe hacer, lo “whendorizo”; le metió colores y chistes pin pon. Ahora tras ver el “Snyder Cut”, es bastante evidente que todo lo incomodo de “La Liga de la Justicia” de Whedon fue producto de Whedon y aquella formula que le funcionó a Marvel no puede aplicarse a todas las películas esperando el mismo resultado. Lo que siempre ha necesitado la DC era diferenciarse de Marvel y, sin embargo, Whedon no conoce otro estilo más que el suyo.
Las denuncias de Whedon se intensificarían a principios de este año con una carta escrita por Charisma Carpenter, la recordada Cordelia Chase en "Buffy" y "Angel", pero ese ya es otro tema. Para entonces, Whedon por su propio comportamiento, por sus propios clichés, estaba al otro lado del espectro, ya no era el director admirado, sino un cliché andando, ya no era ese creador genio, era un machista, pero, sobre todo, era responsable del fracaso de “La Liga de la Justicia”. El estudio también se convirtió en el enemigo principal de los fanáticos, pues, habían privado a Snyder de su visión. La campaña siguió adelante y cada vez tenían más apoyo, incluso del propio Snyder.
En la Red Carpet de “La Liga de la Justicia”, Snyder le dijo a Kevin Smith que un modo de retribución que tuvo ante el aprecio expresado por la campaña del “Snyder Cut” fue publicar fotos y detrás de cámaras de la película, pero jamás se imaginó que el Snyder Cut pudiera ser una realidad.
Y tenía razón, pues, que un director presente su montaje extendido suele sucede, pero que un director que ha tenido problemas por la interferencia del estudio sea capaz de mostrar su producto como siempre quiso es un caso imposible. De hecho, David Ayer, el director de “Suicide Squad”, que también vio mellada su visión por interferencia del estudio, también quiso hacer su campaña, pero no funcionó.
¿Por qué funcionó la campaña del “Snyder Cut”?
Para entender esto es necesario saber que Snyder es uno de los directores más amables de Hollywood. "En un momento de historias de creadores abusivos, Snyder es una anomalía", dice la nota de Vanity Fair. Esto es algo repetitivo, diversos actores y gente de producción han destacado el ambiente laboral del set con Snyder, en especial los involucrados en “La Liga de la Justicia", lo que contrasta con las experiencias que tuvo el mismo equipo con Whedon. Entonces, cuando algo malo le pasa a alguien bueno genera emociones más fuertes, cuando una injusticia le toca a alguien bueno, pues, necesita reivindicación. A esto hay que añadirle que el 2020 fue un año anómalo. Se desató una pandemia que llevó a acelerar los planes de las plataformas streaming y HBO lanzó HBO Max, que no es HBO GO, en realidad, aun hay mucha confusión respecto a HBO Max, pero el punto es que HBO Max no tenía mucho que ofrecer y tampoco contaba con el tiempo suficiente para desarrollar nuevos proyectos. En este contexto, Warner vio el potencial del “Snyder Cut” sobre todo por la publicidad gratuita y la oportunidad de hacer algo sin precedentes en su nueva plataforma. Es un win-win para todos. De ese modo, el “Snyder Cut” pasa de ser una anécdota a una de esas historias de resiliencia y reivindicación que tanto que encantan a Hollywood porque el “Snyder Cut” es básicamente la justicia divina solidarizándose con Snyder.
Nunca sabremos si es que esos críticos que ahora le dan un buen review al Snyder Cut, les habría gustado igual si no se supiera el periplo de Snyder. Lo cierto es que esas cosas tan Snyder que sacaban de quicio a sus críticos, como los slow motion, el estilo barroco, la solemnidad hortera, los planos estéticos, pero sombríos, ahora son vistos con otros ojos, quizás porque en comparación tiene más coherencia que la versión de Whedon.
El mayor mérito del “Snyder Cut”, como lo señala este articulo de Slate, es que se atreve a arriesgar y se aleja bastante de las películas de Marvel. “La Liga de la Justicia de Zack Snyder” es un blockbuster con una personalidad, algo sumamente importante, pues, de las 20 películas de Marvel, solo la primera de “Ironman”, “Avengers”, “El Soldado de Invierno”, “Guardianes de la Galaxia” y “Thor Ragnarok” y “Pantera Negra” destacan por su personalidad, lo que Slate describe como “idiosincrasias y riesgos que indican las huellas dactilares de alguien en toda una obra de arte en lugar de un producto corporativo pulido y pulido”. En otras palabras, son las huellas del director lo que hace cool una película. Para bien o para mal, Snyder puso los cimentos del universo cinematográfico de la DC y lo hizo con una propuesta que parecía ser la antítesis de lo que presentaba Marvel, su competencia más directa. Mientras que los héroes de Marvel eran personas con poderes extraordinarios, los de Snyder eran dioses que necesitaban reconectarse con su humanidad.
Cabe resalta que Snyder es de esos directores que goza de un estilo propio, pero cuyas películas siempre terminan siendo vapuleadas por los críticos y ocasionando discordia entre los fanáticos. El “Snyder Cut” es un proyecto personal de Snyder pero también es una muestra de que pequeños detalles pueden cambiar una película, de ese modo, Cyborg se convierte en el corazón de la película, no se cosifica a Wonder Woman y la historia se siente más orgánica. ¿Tiene Fanservice? Por supuesto que sí, pero… ¿qué película de héroe no tiene un fanservice? Si fuera así, ahora mismo no habría un boom de cuentas en Youtube explicando los dichosos easter eggs.
Sin embargo, el mejor guiño de la película no nace de un comic; se encuentra en un cartel que tiene como mensaje “Tú no estás solo”. Flash no está solo. Tampoco lo está Zack. Ni tu tampoco. Todos conocemos el contexto. Es difícil separar la historia detrás de la película de la propia película en especial cuando al final de la película aparece “Para Autumn”.
Joe Manganiello (Deadstroke) calificó al Snyder Cut como un “experimento sin precedentes” en la historia del cine, pero la verdad es que la WB jamás habría permitido el estreno de una película de 4 horas en el cine, sí en una plataforma streaming. Si la gente ve una temporada completa en un día, bien puede aguantar 4 horas. Por el momento, todos están disfrutando este evento raro y único, aunque la WB ya puso el freno descartando haya una secuela de Snyder, eso no ha impedido que la campaña “Restore the Snyderverse” haya resurgido en las redes. El actor Joe Morton, que le dio vida al Dr. Silas Stone, considera que la industria debe escuchar más a las campañas y debe “darle a la gente lo que quiere”. Pero según los estándares de la WB, la versión de Josh Whedon es canon, mientras que la de Snyder no. Además, la WB ha pedido que se refieran al Snyder Cut como “La Liga de la Justicia de Zack Snyder”. Decisiones que no se entienden y que no tienen sentido.
Lo de Zack Snyder es un caso extraño. Si no fuera real, bien podría ser la premisa de una película de héroes, a la que tanto nos tiene acostumbrados Hollywood, esa donde el protagonista tiene una misión, pero se enfrenta a diferentes obstáculos y personas que frenan su esfuerzo, y cuando parecía que las cosas no podían ir peor, una tragedia personal lo obliga de alejarse de ese proyecto, después de un tiempo, las circunstancias se alinearon para que él pueda completar su misión, pero ya no se trata de solo una misión, es un proyecto personal. Por el momento, Zack, el director predilecto del internet, ha sido reivindicado, y hasta va a lanzar una versión en blanco y negro de su “Liga de la Justicia”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario