La crisis de #Marvel: Fase 4

Durante mucho tiempo se dijo que Marvel había encontrado la fórmula perfecta para sus películas. Pero luego llegó el final de la Fase 3 del Universo Cinematográfico de Marvel (MCU); Endgame; y lo cambió todo. De hecho, Marvel cayó en el mismo error que el Arrowverso después de "Crisis Infinita", tras marcar un hito importante, sentar las bases para una nuevo mundo, parecía prometer una mayor conexión entre las producciones, sin embargo, al igual que en Arrowverso, en Marvel todo volvía a estar como antes con producciones independientes entre sí y con cameos o apariciones fugaces. Con eso, la Fase 4 empezó con demasiada expectativa sobre sus hombros y con una dirección que no parecía estar definida. Era como si fuera un periodo de transición y para menguar el camino, se le daba a los fans lo que querían o al menos lo que ellos pensaban que querían. 

La crisis del multiverso

Después de la conclusión de la Saga del Infinito en Avengers: Endgame, Marvel Studios tenía la oportunidad de explorar nuevos territorios, presentando nuevos personajes y conceptos, sobre todo, el multiverso. Una de las cosas que los fanáticos han pedido más es que Marvel Studios junte a más personajes en la pantalla. Esto se hizo en cierto modo en Spider-Man: No Way Home, pero después vino Doctor Strange in the Multiverse of Madness, una decepción para muchos, ya que se centró más en cameos que en una historia sólida. Para su mala suerte, antes de Doctor Strange, se estrenó una película que exploró el concepto del multiverso con un presupuesto mucho menor y que con poco, hizo de todo, convirtiéndose no solo en una de las mejores películas del 2021, sino en el estandarte de las películas sobre multiverso. Estoy hablando de Everything Everywhere All at Once, cuyo mayor atractivo fue el hecho de que ante todo era una película original y creativa, ofreciendo una experiencia cinematográfica única. 

En ese sentido, no se puede decir que Black Widow, Shang-Chi and the Legend of the Ten Rings y Eternals ofrecían algo nuevo porque estas películas seguían la fórmula Marvel de introducción de personajes. En el caso de Black Widow, se trató de una película que se desarrollaba entre Civil War e Infinity War al mismo tiempo que era una suerte de despedida de Natasha tras Endgame. Mientras que por su lado, Thor: Love and Thunder, y Ant-Man and the Wasp: Quantumania, fueron destrozadas por la crítica por sus guiones poco originales, sus personajes planos y su falta de innovación. 

La crisis de las series de Marvel 

Tras Endgame, Marvel había planeado varias producciones, incluyendo, por primera vez en su historia series que tendrían una conexión directa al MCU. Pero de todas las series que se liberaron en Disney+, solo WandaVision y Loki, han sido elogiadas por su originalidad y su innovación. Después, todas ellas; Falcon and The Winter Soldier, Hawkeye, Moon Knight, Ms. Marvel y recientemente Secret Invasion, han tenido los mismos problemas: una trama madura con un potencial tremendo en el lado humano que no termina de desarrollarse por completo, y pese a contar con el tiempo, se desarrollan con un ritmo lento y al final terminan en el mismo modo Marvel; una gran secuencia final, con muchos efectos especiales, sin tener mucha repercusión. Es más en algunos casos, estas series simplemente fueron para introducir personajes, como Ms. Marvel y Moon Knight, que serán utilizados más adelante en diferentes proyectos, dejando un sabor agrio. 

En un punto aparte debemos analizar a She-Hulk: Attorney at Law. Esta producción, hasta el momento, es la más traviesa, la más friki y también la más odiada de Marvel. Es una sitcom con un tono ultra meta, pero su humor no siempre es acertado. Podría haber tenido mejores historias, pero sí fue diferente. Sin embargo, fue altamente criticada por su humor "vulgar" y la representación de la sexualidad femenina. Por alguna razón (misógina), los hombres no quieren ver a un personaje femenino fuerte, independiente y que le gusta tener sexo. Quién sabe por qué. Nadie le hizo problemas a Matt Murdock cuando se acostó con casi todas sus coprotagonistas en Daredevil, pero sí a She-Hulk. 

Otra ironía es que What If..., la primera producción animada de Marvel, es quizás la más original que ha ofrecido hasta el momento incluso que más Loki ya que sí aprovecha el multiverso. Sin embargo, también se comete el pecado de terminar de nuevo en un modo muy Marvel uniendo todas las historias, cuando lo interesante de ellas era que solo una pequeña muestra del gran potencial del multiverso. Para añadir más problemas, la reciente Secret Invasion fue la última decepción de Marvel. No solo tuvo pocas visiones, sino que también reescribió la historia de las películas con la revelación que Rhodes era un Skrull, todo para un futuro no muy cercano, que sería la fase 6, después de la dinastía de Kang en la fase 5. Lo triste de esta serie es que es una de las más caras de Marvel, pero al verla parece una producción pequeña y con elenco de peso pero limitado (solo dos protagonistas y tres secundarios). El presupuesto quizás se deba a que más se gastó en los protocolos contra el COVID que en la propia historia. De nuevo, para variar, volvió a terminar con una pelea gigantesca y un personaje casi invencible. 

La crisis externa e interna de Marvel 

Aunque Marvel cumple con los números en verde, ya se comienza a denotar una decadencia en la calidad. Se le atribuye a esta crisis una serie de factores siendo la principal la fatiga de las películas de héroes y también los cambios de consumo del espectador, pues, la pandemia acostumbró a la gente a ver películas en la comodidad de su hogar. Además, actualmente en Hollywood hay una suerte de crisis de nostalgia y hay películas que aprovechan esa idea, como Spider-Man: No Way Home. Sin embargo, hay una gran diferencia entre hacer un homenaje o tener un guiño y utilizarlo de manera descarada capitalizando el cariño que se le tiene a una figura familiar. Y Marvel siempre camina en una línea muy delgada en ese sentido. 

Pero en esta fase 4, han saltado diferentes historias detrás de cámara, como los escándalos de Jonathan Mayors, la polémica por el uso reciente de una IA para la realización del intro de Secret Wars, y las denuncias de explotación de los artistas de efectos especial en donde se detalla las presiones que viven para cumplir con sus proyectos, lo que explica porque también los efectos han sido tan malos en las últimas producciones. No hay manera de minimizarlo: La cuarta fase ha sido un fracaso, con películas que han llevado gente a los cines, pero que han sido destrozadas por la crítica, y series que han dejado de entusiasmar a su público para convertirse en una tarea impuesta. Curiosamente, así como The Flash puso de moda varios canales de YouTube que analizaban cada episodio, la cuarta fase de Marvel ha puesto de moda canales que te explican y resumen las series para que ya no tengas que verlas.

La caída en calidad de Marvel era predecible, ya que el Arrowverso (con gran distancia de la calidad de Marvel) experimentó una crisis similar y una decadencia peor. Pero el problema es que el Arrowverso nunca tuvo un futuro asegurado, mientras que Marvel, hasta ese momento, ya tenía dos fases en desarrollo. Actualmente, todas las producciones están en stand by debido a la huelga de guionistas y actores, y en ese contexto, Marvel ha anunciado que priorizarán la calidad antes que la cantidad. Y de nuevo, Marvel tiene el potencial de superarlo todo y ser la franquicia exitosa que alguna vez fue, pero para esto necesita no solo centrarse en la calidad, sino también en tratar con respeto a sus empleados y abrirse a la idea de que es necesario cambiar e innovar para sobrevivir en este mundo. Curiosamente, es lo que hacen los héroes ante cada nueva amenaza; evolucionan en todos los sentidos.